martes, 12 de mayo de 2009

Reflexiones agustinianas sobre memoria y tiempo

En Confesiones, San Agustin definia al tiempo como una distencion del alma. El tiempo ya no seria este continuo fluir en el cual estamos inmersos, ajeno a nosotros. Por el contrario, el tiempo es lo que existiria en la medida en la que existen almas. Es solo gracias al hombre que podemos hablar de un “pasado”, de un “presente” y de un “futuro”. La memoria es para Agustin una verdadera virtud del alma de pensarse a si mismo, de conocerse a si mismo. Es decir, es en la medida en que somos seres temporales que nos concebimos y nos comprendemos, gracias a la memoria. Bajo esta idea, en terminos exactos no habria ni pasado ni presente ni futuro. Solo cabria hablar de memoria del pasado, memoria del presente y memoria del futuro. De esta manera se desoculta el verdadero sentido de memoria: es la condicion de posibilidad de nuestro actuar en el mundo. Si no, como diria Nietzsche, seriamos como “el tropel pastando a tu lado: no sabe lo que es el ayer ni el hoy, corre de un lado a otro, pasta descansa, digiere y vuelve a correr (…) Asi, con la gana y el desgano amarrado al poste del instante, no siente melancolia ni tedio”

Al mismo tiempo es evidente que para acordarnos de algo, para tener memoria de algo, es necesario olvidar otras cosas. Es indispensable olvidar para tener memoria. ¿En que medida este olvidar puede tener un papel aun mas preponderante que el recuerdo? (creo que esto es lo que mas le interesaba a Paulo) Aqui cabria hablar de algun tipo de ruptura consciente con el pasado, para seguir el imperativo de la estetica, el imperativo del presente, sin pasado. El goce del presente (que solo es posible por memoria del presente, es decir por la toma en consideracion de la idea momentanea, que tambien tiene duracion, pero que se aleja del pasado para mantenerse siempre presente) o la creacion del presente.

No quiero ir mas lejos. Estas ideas de impronta agustiniana, me parecen relevantes para el tema de la memoria. Pues es en la memoria y solo en ella que el ser humano se reconoce como tal. El arte, como expresion o actividad del ser humano, seria la toma en consideracion de un tipo de memoria (psicologica, historica o lo que fuera) que posibilitaria la relacion bilateral entre el artista y la obra de arte.

Toda esta reflexion viene de darle una importancia vital al tiempo, (y a la memoria como unico modo de conciencia de este tiempo) como lo que “respira” el ser humano. Pero, otra vez, el tiempo es tiempo gracias al interes del ser humano, gracias a su actividad.

Tildes omitidas. Disculpen estoy en una compu que no cree tildes.
Sergio

1 comentario:

  1. Hoy mi profe de Literatura italiana habló un poco sobre el olvido y la memoria. El río Leteo en el Purgatorio de Dante, de alguna forma, permite olvidar, y olvidar es importante para seguir conociendo.
    Pero además Dante también se baña en el Eunoes, que le permite un "buen (eu) conocimiento (noesis)".

    Platón también habla sobre el Leteo en el libro X de la Repúblca, antes de que las almas se reencarnen. Agustín, según D'Onofrio, coge de Platón lo del conocimiento que viene del "más allá", pero como buen cristiano, no acepta la reencarnación del alma, así que le da importancia a la iluminación divina.

    Como ves, mis referencias en el tema antiguo son más que nada de oídas; la verdad no conozco mucho del tema, pero lo que has posteado está bien paja.

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